¿Cuáles son los síntomas de ansiedad más comunes?

ansiedad

Pueden presentarse diversos síntomas, los más frecuentes:

  • Síntomas cognitivos o psicológicos: la persona presenta dificultar en la toma de decisiones, llegando incluso a no poder tomarlas por sí mismo por miedo. Sensación de pérdida de control, preocupación, temor, imposibilidad de concentrarse, dudas, déficit de atención, falta de confianza en sus propias capacidades, sensación de hacer el ridículo, baja autoestima, ideas obsesivas, pensamientos negativos, sensación de peligro o amenaza, pensamiento acelerado, despersonalización, desrealización, miedo a morir o volverse loco, susceptibilidad, etc. 
  • Síntomas conductuales: la persona tiende a realizar conductas repetitivas como, por ejemplo: mover los dedos de la mano, la pierna, rascarse incipientemente, etc. Presentan hiperactividad junto con alteraciones de la alimentación, por ejemplo: comer compulsivamente o lo contrario. Se activan las actuaciones de evitación a todo aquello que provoque ansiedad.
    Se incrementan los llantos incontrolados, la parálisis, el tartamudeo, la rigidez o temblor, aumentan el consumo (en caso de haberlo) del tabaco, alcohol, sexo, compras, videojuegos, móvil, etc. Surgen los bloqueos, el deseo de escapar o huir ante determinadas situaciones, problemas para permanecer tranquilo en un mismo sitio.
  • Síntomas fisiológicos o somáticos: el sistema nervioso central (SNC) se activa y se prepara para estar preparado ante una amenaza, por lo que comienza la hiperactivación, dificultad para respirar, para hablar, exceso de sudoración.
    También sensación de ahogo, taquicardia, palpitaciones, sequedad en la boca, enrojecimiento, tics, vértigo, mareo, náuseas, molestias estomacales o sensación de tener un nudo en el estómago, rigidez y tensión muscular o debilidad muscular. Sensación de inestabilidad, temblores, insomnio, hormigueo, dolor de cabeza de modo tensional y cansancio. 
  • Síntomas emocionales: se experimenta irascibilidad, inseguridad, angustia, miedo, sensación de vacío o de sentirse extraño, incertidumbre y/o déficit de tranquilidad.
  • Síntomas sociales: aparición de la verborrea o mente en blanco, dificultad para mantener el hilo de una conversación, temor frente a los conflictos interpersonales, conflicto interno a la hora de hacer valer tus propios derechos o expresar tus propias opiniones frente a otros. 

Todos estos síntomas de la ansiedad varían de una persona a otra, ya que cada una puede experimentar unos síntomas determinados. Todo dependerá de su vulnerabilidad, sus experiencias previas o su predisposición psicológica y genética.

La persona que presenta ansiedad y no está en tratamiento para la misma, su sintomatología a largo plazo puede derivar en otra serie de síntomas más molestos: migrañas, insomnio, fatiga, disfunciones sexuales o estomacales, incluso llegando a salir nuevos trastornos.